Una polémica envolvió esta semana a los cigarrillos, esto porque entre los denominados "bienes esenciales" de uso doméstico consideraron encendedores y tabaco, lo que implica que se puedan vender incluso en la fase 1 del plan Paso a Paso.
La definición fue criticada por distintas sociedades médicas y grupos sociales al punto de que el propio ministro de Salud, Enrique Paris, se refirió al tema aseverando que "este jueves dejan de ser bienes esenciales".
Sin embargo, la definición de estos productos en esa categoría son parte de una medida transitoria que se extiende hasta el jueves. Muchos se preguntan, entonces, cuáles son los fundamentos de esta clasificación.
"Se ha demostrado que (el fumar) confiere mayor contagiosidad, se vulnera el uso de la mascarilla, por ejemplo", explica la dra. Laura Mendoza, Presidenta de la Sociedad Chilena de Enfermedades Respiratorias. En Chile, una de cada cinco muertes por cáncer se asocian al consumo de tabaco, el que además de aumentar las enfermedades crónicas genera dependencia.
Es justamente esa dependencia la que lleva a otros a desear mantener los cigarrillos como bienes esenciales. "No es un bien esencial por ningún motivo, pero se estaría optando por un mal menor", comenta el académico de Psicología de la Universidad de Los Andes, Pablo Urrutia, añadiendo que una persona en abstinencia en medio de la pandemia podría tener algunas problemáticas.
Sobre la definición de "qué es un bien esencial", la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, aseveró que el ministerio de Salud "no define los bienes esenciales, lo que define son las medidas sanitarias" como la restricción de movilidad.