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Tras huir a Colombia, algunos militares venezolanos están dispuestos a luchar contra Maduro

Aunque la deserción no se castiga con pena de muerte en Venezuela, las leyes establecen una pena máxima de 30 años de prisión.

Agencia Reuters

Miércoles 31 de diciembre de 1969

El sargento primero Javier González sabía que si era atrapado desertando de las Fuerzas Armadas de Venezuela podría ser asesinado, pero halló el valor para decidirse en su hijo de nueve meses, que estaba sufriendo por la falta de leche y pañales en medio de la crisis económica.

El domingo, un día después de abandonar su país, su esposa, la sargento mayor Karí Castro, le siguió los pasos y escapó con el bebé y dos familiares más por una trocha cercana al principal puente fronterizo con Colombia, en la ciudad de Cúcuta.

"(Deserté) por la vida de mi hijo, prácticamente estamos pasando necesidades en Venezuela", dijo González, que pasó ocho de sus 28 años en la Guardia Nacional, con una voz que reflejaba agotamiento. "Estamos trabajando por un sueldo que no nos alcanza para nada, no podemos vivir en miseria, ya basta, estamos cansados".

Aunque la deserción no se castiga con pena de muerte en Venezuela, las leyes establecen una pena máxima de 30 años de prisión. Pero los efectivos de las fuerzas de seguridad del vecino país que huyeron a Colombia creen que si los servicios de inteligencia los hubieran descubierto habrían sido asesinados.

González y Castro son dos de los 167 uniformados de cuatro fuerzas de seguridad venezolanas que escaparon de su país en los últimos tres días por caminos ilegales y puentes en la frontera colombiana, según Migración Colombia, entidad que los está protegiendo.

La deserción de los militares se dio en medio de un fallido operativo del Gobierno de Colombia y el líder opositor venezolano Juan Guaidó -autoproclamado presidente interino y reconocido por decenas de países- para ingresar a Venezuela toneladas de ayuda humanitaria donadas por Estados Unidos y países de la región, varias de las que acabaron incineradas.

"Es duro salir a otro país después de que tienes tantos años en una institución donde entregaste tu vida. Pero en apoyo a mi esposo, que fue el primero que se vino, yo decidí acompañarlo, apoyarlo y en vista de ver toda la situación, todo lo que está pasando en Venezuela", dijo Castro, quien estuvo la mitad de sus 38 años en las Fuerzas Armadas.

¿MÁS DESERCIONES?

Su esposo admitió que tras el escape ha tenido contacto con otros compañeros que están pensando en desertar.

"Actualmente están activos, pero lo quieren hacer y lo van a hacer, porque yo tengo muchos compañeros que están escribiendo y están motivados, solamente que les falta ese pequeño impulso", dijo González al pedirles actuar con "nervios de acero".

Los dos uniformados dijeron en Colombia que están dispuestos a volver de la mano de Guaidó para recuperar el poder que ostenta el presidente Nicolás Maduro, quien niega que haya crisis en su país y rechaza la ayuda humanitaria, argumentando que es en realidad un plan intervencionista de Estados Unidos.

"Para la tropa profesional que no se rindan, que vamos a seguir luchando por nuestro país Venezuela, que nunca es tarde para dar el paso. Si nuestro presidente Guaidó nos está dando el apoyo vamos a apoyarlo", aseguró González.

"Y si tenemos que formar las tropas de la Guardia Nacional aquí y de los otros componentes para planear la toma de nuestro país, si hay que hacerlo lo hacemos. Para eso estamos aquí", dijo mientras se alistaba para hacer unos trámites migratorios.

Hasta ahora no ha desertado ningún alto mando. Los numerosos generales mantienen el apoyo a Maduro. De acuerdo con los cuadros inferiores de las Fuerzas Armadas gozan de grandes beneficios y salarios, muchos de los cuales -según los desertores- se pagan en dólares ante la hiperinflación que azota a la nación petrolera.

El presidente de Colombia, Iván Duque, dijo el lunes que las deserciones muestran que las fuerzas de Maduro ya están resquebrajadas por dentro y les pidió a todos los efectivos colocarse "al lado correcto de la historia" para que se restablezca el orden institucional y democrático en Venezuela.

"Hoy debemos hacer el llamado para que se active el efecto dominó por parte de las Fuerzas Armadas entregando su lealtad a la Asamblea Nacional", afirmó Duque al pedir que reconozcan a Guaidó como mandatario legítimo del país petrolero.