En Argentina uno de los principales señalados por la derrota en la final de la Copa América fue, como no podía ser de otra manera, Lionel Messi.
Los medios trasandinos, unos más y otros menos, criticaron al astro por no haber brillado ante Chile cuando más se lo necesitaba, algo que también se repitió en el duelo decisivo ante Alemania en Brasil 2014.
Uno de los más duros fue el periodista Leonardo Farinella del Diario Olé, quien alabó a Mascherano y cuestionó que fuera el astro del Barcelona el que la porte.
"Está mal puesta la cinta de capitán. Terminemos con esto. El mejor jugador del mundo no nos representa en los momentos importantes. Su actuación de ayer fue, directamente, indignante", aseguró.
Además, agregó que "hay veces que se puede jugar bien, otras no. Pero nunca puede uno caminar y caminar ausente mientras los compañeros se pelan el traste. Ser el mejor no sólo da derechos. También, obligaciones".
En tanto, Marcelo Sotile, también de Olé, destacó este reiterado mal rendimiento de Messi en las grandes citas con la albiceleste, afirmando que "Messi no fue nunca al psicólogo. Él se descarga con su familia, sus hermanos, sus amigos. Pero esto que le pasa en las finales con la camiseta argentina es para el diván. O para un brujo".
Además, afirmó que pareciera que "el contexto negativo, en vez de rebelarlo, a Leo apagase. De a ratos se hundió él mismo mirando al suelo, con el partido hirviendo".
Por otra parte, Daniel Arcucci, de cancha llena aseguró que Messi "una vez más, como en Brasil, la instancia decisiva pasó más por la épica de Mascherano que por su magia. A diferencia de todo lo que sucedió durante el resto de la Copa, nunca tuvo la pelota con seguridad, pero tampoco nunca tuvo opción de pase por delante y recepción de pase por detrás. Se fue del partido, literalmente, más de una vez".
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