Tal como sucedió en un apasionante duelo de penales a ojos vendados, Sergio Agüero y David Villa volvieron a enfrentarse en dos particulares desafíos de habilidad.
La Academia de Fútbol del Manchester City citó a los dos goleadores para que mostraran su precisión en la pegada, lo que fue medido en dos entretenidas pruebas.
La primera de ellas, y segunda etapa del desafío después de los penales, fue el de intentar acertar al travesaño la mayor de veces posibles, teniendo diez oportunidades en total cada uno.
En tanto, el otro desafío consistió en patear córners y tratar de convertir goles en tres arcos de distintos tamaños, donde el acierto en el más pequeño otorgaba 100 puntos, en el mediano 50 y en el más cercano 25.
En las dos oportunidades, Agüero terminó llevándose el triunfo, aunque uno más cómodo que otro, pero siempre quedando en evidencia la buena relación entre ambos jugadores.