Corría el minuto 84 de la semifinal del Mundial de Brasil 2014 entre Alemania y el elenco dueño de casa. El Mineirao era un mar de lágrimas.

Los germanos ganaban cómodamente por 7-0 y sacaban pasajes para la final de la cita planetaria, la que finalmente terminarían ganando a Argentina en el tiempo extra.

En el descanso los jugadores alemanes se propusieron no bajar el acelerador, pero no humillar a su rival.

Por eso, esta acción del minuto 84 demuestra claramente que los actuales campeones del mundo bajaron el ritmo y en vez de ir hacia adelante en busca de más goles, prefirieron en otras oportunidades tocar hacia atrás.

Özil arrancaba por la banda derecha, con opciones —un tanto limitadas, es verdad— de abrirse paso por aquel sector. Lo marcaban dos jugadores.

Lo particular de esto es que David Luiz había abandonado su labor defensiva, por lo que un cambio de ritmo o un pase en profundidad podría haber dejado a un alemán solo frente a Julio César.

Sin embargo, el zurdo advirtió esta situación, pisó el freno, enganchó y tocó hacia atrás.

Unos segundos después se ve a David Luiz volviendo (muy tarde y a toda velocidad) a la defensa, momento en el que se topó con Özil.

En un acto de caballerosidad y de hombría por parte de ambos, se saludaron al paso chocando sus palmas, como diciendo "gracias" de parte de David Luiz y un "no hay problema" de parte del alemán.

Mira aquí esta pequeña demostración: