El presidente de Blanco y Negro, Aníbal Mosa, admitió este miércoles haberle perdido perdón al arquero nacional Claudio Bravo por el episodio que vivió el campeón de América a fines del año 2014, cuando no fue autorizado para entrenar en las dependencias del club albo.
El pasado 27 de diciembre, el guardameta del Barcelona tenía previsto participar en la práctica del ‘Cacique’ aprovechando el parón liguero en España por las fiestas de fin de año. Sin embargo, el entonces entrenador del elenco popular, Héctor Tapia, negó el ingreso del nacido en Viluco por unas declaraciones donde criticaba los reclamos de Julio Barroso en contra de los arbitrajes en el fútbol chileno.
Luego que Bravo volviera a practicar en la presente jornada en Pedrero, Mosa declaró a radio Cooperativa que “la posibilidad surgió ayer (martes) en la noche, nació de Julio Rodríguez que quiso entrenar y obviamente le dijimos que las puertas del estadio estaban abiertas. Lo que ocurrió no debió pasar nunca. Le fui a pedir disculpas personalmente a Claudio y esperemos que sea una etapa superada”.
“Conversamos del desaire que se le había hecho, que el directorio no estaba de acuerdo, que nos enteramos por la prensa y que ésta es su casa”, agregó el mandamás de la concesionaria del elenco popular.
Por otro lado, el máximo dirigente le bajó el perfil a la incomodidad que hizo pública el meta paraguayo Justo Villar por no tener respuesta a su suplencia en el inicio del Torneo de Apertura. El titular en la fecha inaugural, en el triunfo 2-1 sobre Unión Española, fue Paulo Garcés.
“Es normal lo que sucede, está bajo todo control. (Sierra) Tiene para elegir entre dos muy buenos nombres. ¡Qué bueno tener ese problema!. Vamos a salir bien parados de esto”, expresó.
Fuente: Agencia Uno