Universidad de Chile espera atentamente por conocer la resolución de la Conmebol tras los incidentes ocurridos el pasado 20 de agosto en Avellaneda. Los azules, en caso de recibir un fallo deportivo favorable, podrían clasificar directamente a cuartos de final de la Copa Sudamericana y enfrentar a Alianza Lima.
Dicho partido ante el conjunto incaico está agendado para el jueves 18 de septiembre. Precisamente, a causa de esta programación, la Supercopa del fútbol chileno corre peligro de disputarse, una vez más, ya que Universidad de Chile estaría evaluando solicitar la suspensión del partido ante los albos.
La postura de los azules se da a causa del poco tiempo que tendrían para descansar y preparar uno de los compromisos más importantes de la temporada, ya que cuatro días antes sería la definición frente a los albos.
Ahora bien, en caso de que la petición de Universidad de Chile sea rechazada y deba disputar el encuentro ante Colo Colo, La U estaría evaluando presentarse con un equipo juvenil.
La postura de Michael Clark
Al respecto, Michael Clark, presidente de Azul Azul, aseguró que “obligarnos a jugar una Supercopa el 14 de septiembre para que cuatro días después se juegue quizás el partido más importante de la U en el año, no tiene ningún sentido”, comentó.
“Se lo dije personalmente a la gente de la liga, a Yamal Rajab y se lo dije también personalmente al secretario ejecutivo, Jorge Yunge, y esto fue antes de que pasara todo lo de la situación en Argentina, que si nos iba bien en esta llave con Independiente y avanzábamos a los cuartos de final, nosotros no estábamos por jugar la Supercopa", agregó.
