Tras varias semanas de negociaciones, finalmente Universidad de Chile oficializó la salida de Gustavo Álvarez, quien rompió el silencio y abordó los motivos que lo llevaron a tomar la decisión de dar un paso al costado.
“Mi principal objetivo era terminar bien la relación”, señaló Álvarez en diálogo con TNT Sports.
En esa línea, el DT explicó que el vínculo contractual incluía una cláusula de extensión que podía terminar en una disputa judicial, por lo que optó por una salida negociada donde hubiese una compensación económica para el club: “A nosotros nos vinculaba un contrato de dos años con un tema de una extensión […] que podía poner la cuestión en un tribunal. Preferí evitarlo”.
“Que haya un reconocimiento, un gesto hacia el club con una cifra acordada por ambas partes”, agregó.
Desmintió rumores de quiebre
“No lo quise terminar con carta documento, aún con posibilidad de irme a cero peso. No es mi forma de actuar”, sentenció.
Respecto a los rumores de un quiebre con la dirigencia, Álvarez explicó que “me parece que toda relación se va desgastando poco a poco y es normal en todos los ámbitos de la vida. No hubo hechos puntuales de suma gravedad que provocaron una ruptura, sí un desgaste que considero normal”.
