La historia de Oscar Pistorius es increíble.

Lejos de rendirse, el atleta sudafricano que sufrió la amputación de sus dos piernas, decidió seguir adelante y con sendas prótesis ha sabido ganarles a todos y hasta participar en los Juegos Olímpicos de Londres.

El seis veces campeón paralímpico fue partícipe de un reto complicado: vencer a un caballo purasangre en una carrera de 200 metros.

Al igual como lo hizo el nacional Sebastián Keitel en su momento, el atleta aceptó el reto y obtuvo la victoria.

"Participar me da la oportunidad de inspirar a la gente y de darle confianza, comentó tras el evento el joven de 26 años.

Esta proeza se enmarca dentro de la campaña "Definitivamente Capaz", la que se encarga de promover e incluir a las personas discapacitadas a la sociedad.