Impacto a nivel mundial ha causado la noticia de que el ex tenista alemán Boris Becker, ganador de seis torneos del Grand Slam, fue condenado por un tribunal británico a dos años y seis meses de cárcel, de los que cumplirá la mitad, por cuatro delitos financieros relacionados con su quiebra en 2017.
En ese contexto es que continúan surgiendo detalles entorno a la condena, como es el caso de la cárcel de Wandsworth, lugar donde el ex número uno del mundo deberá afrontar al menos la mitad de su pena, y la cual ha sido calificada por medios locales como "una de las peores de Inglaterra".
Y es que según informó el diario Daily Mail, la prisión que se ubica en la ciudad de Londres no cuenta con las condiciones básicas de salubridad: "En una inspección reciente, la institución fue descrita como ‘desmoronada, superpoblada e infestada de ratas e insectos’".
Además, indicó que se trata de una cárcel arruinada "por el abuso de drogas y problemas de salud mental, donde algunos reclusos pasan más de 22 horas al día en celdas dilapidadas".
De hecho, un ex prisionero de ese lugar, Chris Atkins, reveló hace unos años que es "una de las cárceles más infames del país".
"Los reclusos en su mayoría parecen tener una enfermedad mental grave, estar locos por las drogas o ambos", agregó.
Cabe recordar que la sentencia a Boris Becker se conoció luego de que el pasado 8 de abril el tribunal de Southwark le hallara culpable de cuatro delitos financieros cometidos entre el 21 de junio y el 3 de octubre de 2017, después de que el jurado considerara probado que la leyenda del tenis ocultó activos y préstamos por un valor de 3 millones de euros para evitar pagar sus deudas, las cuales ascienden a 60 millones de euros.