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Los germanos ayudaron en Brasil, país que los acogió de buena manera y con el que concretaron mucha cercanía.

Daniel Andrade

Lunes 14 de julio de 2014

La Selección Alemana no solamente se hizo grande dentro del campo de juego, sino que también fuera de él.

Esto porque los germanos también mostraron su lado más solidario antes del gran partido donde derrotaron a Argentina en el Maracaná, el que les entregó el cuarto título de su historia.

La Federación hizo entrega de un cheque de 10 mil euros a un grupo de indígenas de la Aldeia Pataxo, quienes se trasladaron hasta el sur de Bahía, ciudad donde estaba concentrado el equipo germano, para recibir la donación.

Pero no solo eso, ya que la Mannschaft también colaboró con los alrededores que los acogieron durante más de un mes.

 

De hecho, los germanos hicieron la promesa de financiar la construcción una cancha de fútbol en la zona, junto con colaborar con materiales a la Escuela Municipal de San Andrés.

Más allá de la goleada en semifinales, brasileños y alemanes hicieron muy buenas relaciones en esta Copa del Mundo, algo que quedó evidenciado permanentemente.

Los locales festejaron el título germano casi como si lo hubiesen ganado ellos mismos, le dieron el aliento en el Estadio Maracaná, mientras que los europeos agradecieron permanentemente la forma en que fueron tratados y salieron a defender la historia del fútbol de la verdeamarelha cuando todos la criticaban tras el 7-1.