Novak Djokovic distrajo a los espectadores de Roland Garros pero mantuvo la concentración para derrotar con facilidad por 6-1, 6-2 y 6-4 al portugués Joao Sousa y alcanzar la segunda ronda del torneo de tenis de la capital francesa.
El serbio, segundo cabeza de serie del torneo, bromeó con un niño recoge pelotas al que invitó a sentarse en su silla mientras el juez evaluaba si suspender el partido por la ligera lluvia que caía sobre la pista Philippe Chatrier.
El ex mejor exponente del planeta lo invitó a sentarse a su lado y no sólo eso, sino que también a beber una gaseosa.
Esto de inmediato llamó la atención del público, quienes respondieron al gesto del serbio con un sonoro aplauso. Novak Djokovic, fiel a su estilo, comenzó a bromear y le dio su raqueta al muchacho mientras el agarraba el paraguas.
Esto no desconcentró a Djokovic, que apenas se inquietó al ceder un tardío quiebre de saque y golpeó 37 tiros ganadores. En segunda ronda se enfrentará al preferido de la afición, Jérémy Chardy.