La PDI se encuentra indagando las competencias y disponibilidad técnica de la empresa contratada por Carozzi y luego la Sofofa para detectar el espionaje que fueron víctimas Hermann von Mühlenbrock y José Juan Llugany.
Para ello en Las Condes se tomó declaración a un imputado clave. Se trata de Rubén Aros fue contactado como experto por Carozzi y la gremial para efectuar el rastreo.
El presunto experto fue contactado como experto por Carozzi a mediados de mayo y contrató un aparato para rastrear señales, no obstante, tuvo que googlear para aprender a usar.
El procedimiento lo realizó durante un fin de semana en ausencia de trabajadores y directivos de la empresa de alimentos.
Lo que deberán investigar ahora los peritos del cibercrimen de la PDI junto con los fiscales Roberto Contreras y Lorena Parra será por qué se contrató a un investigador privado que posteriormente afirmó no tener los conocimientos adecuados.