En Chile las pequeñas y medianas empresas son las principales generadoras de empleos, alcanzando prácticamente al 70% de los puestos de trabajo, lo que sin duda es un número importante para la economía de un país no sólo por dotar de fuentes laborales, sino que también porque permite aumentar la productividad en épocas de recesión o desaceleración. No obstante, muchas de ellas no logran sobrevivir al temido “Valle de la Muerte”, debido a diversos factores, siendo el principal de éstos las trabas de financiamiento.
Según cifras de la última "Radiografía del Emprendedor Chileno", encuesta elaborada por la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech), que busca dar conocer las actuales condiciones del ecosistema, 46% de los emprendedores chilenos aseguró que las alternativas de financiamiento son lo que más dificulta el levantamiento de su negocio, el 35% cree que es la estructura tributaria y para el 18%, el retraso en el pago.
Para Cristián Lecaros, CEO de Inversión Fácil, “el principal problema de financiamiento que tienen los emprendedores es que hoy solamente hay algunos instrumentos dentro de Startups Chile o Corfo, como Capitales Semilla, donde el desarrollador de algún proyecto pueda sacar capital, ya que los bancos exigen muchos requisitos. Por ejemplo, los bancos van a exigir que la empresa tenga dos años como mínimo y existan balances, donde está la complejidad de la contabilidad y, generalmente, al principio la estructura de una pyme no da para poder llevar una contabilidad sofisticada y que también tenga resultados los primeros dos años”.
Cabe recordar que la tasa que estaba impuesto a las empresas hace unos años atrás era de 17% y hoy, en un régimen parcialmente integrado, podría llevar al 27%. Esto quiere decir que el emprendedor está sacando 10 puntos más desde su capital de trabajo que le serviría para hacer crecer su negocio y se lo tiene que pasar al Estado, y es aquí donde hay una oportunidad en términos de política pública y cambio de leyes, para fomentar desde el punto de vista tributario una mejor manera de emprender en Chile”.
Por otro lado, Alejandro Ramírez, abogado y socio director de IUS Abogado Tributario, resalta que otro gran problema para las pymes “es la demora en el pago de las facturas, generalmente 90 ó más, que implica que pese a no tener financiamiento, deben financiar sus ventas a grandes empresas. En este sentido, el proyecto de pronto pago será de gran ayuda, pero de igual manera se deben establecer sistemas de financiamiento a través del Estado que financien y/o respalden financieramente al pequeño y mediano empresario, como simplificar las obligaciones del sistema tributario para las pymes, considerando que no cuentan con recursos para una adecuada asesoría”.
Según Lecaros, otra de las soluciones para facilitar el financiamiento de las pymes sería “la incorporación potente de formatos de emprendimiento y educación financiera desde la etapa del colegio para que las personas comiencen a familiarizarse desde pequeños con temas y modelos de negocios, esto para que puedan tengan los conocimientos sobre finanzas. Además, hoy la organización que más ayuda es la Asech, donde se han hecho varias iniciativas y siguen haciéndolas a través del liderazgo de Alejandra Mustakis, y ese es el lugar donde hoy hay varias cosas que pueden ser interesantes para poder apoyar el emprendimiento”.