El Banco Central reveló este lunes que el Producto Interno Bruto (PIB) llegó a un 2,8% en el tercer trimestre, confirmándose una desaceleración en la economía chilena.
Con esto, la actividad durante el transcurso de 2018 registró un incremento de 4,2%.
A través del informe de Cuentas Nacionales de Chile se exhibe un aumento de 5,4% respecto al trimestre anterior.
Además, con tres días hábiles menos que el tercer trimestre del año 2017, el efecto calendario resultó igual a -0,4 puntos porcentuales.
Sumado a ello, se observaron incrementos en todas las actividades a excepción de la minería, destacando en términos de incidencia los servicios personales y, en menor medida, comercio y servicios empresariales. En tanto, la actividad agropecuario-silvicola destacó por su dinamismo.
Sin embargo, las cifras ajustadas estacionalmente dieron cuenta de un incremento de 0,3% del PIB con respecto al trimestre anterior, donde la mayor contribución se registró en minería, seguida de transporte y servicios personales.
En tanto, el tercer trimestre volvió a mostrar una fuerte recuperación de la inversión, creciendo 7,1% en el periodo. Dicha alza se vio liderada principalmente por la adquisición de maquinarias y equipos, mientras que la variación de existencias acumula un alza de 1,1% del PIB a precios del año anterior.
Además, la demanda interna mostró una desaceleración al crecer 4,6%.
En esa línea, las importaciones tuvieron una tendencia alcista de 10% versus el 7,5% registrado en las exportaciones, liderando las internaciones de productos metálicos, maquinarias y equipos, combustibles y químicos. Respecto a los envíos destacaron los de cobre y de bienes industriales.
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