De la pasarela a la cárcel.
Así transcurrió la historia de la recientemente electa, Miss Riverton, la señorita Kendra McKenzie Gill quien deslumbró al jurado del concurso de belleza tocando piano y que ahora debe enfrentar a la justicia por cargos muy duros.
Gill fue arrestada en el condado de Salt Lake City bajo 10 cargos de detonar explosivo incendiario, armas que fueron lanzadas a viviendas y personas del condado por un grupo de jóvenes, en el que estaría inserta la reina de belleza.
Los detenidos aludieron a que jugaban con fuegos artificiales, sin embargo la policía aclaró que las bombas podían rociar productos químicos y astillas al explotar.
Ahora la joven debe probar su inocencia si no desea perder la corona, la que los organizadores del concurso Miss Utah pueden arrebatarle gracias a una especial cláusula que indica que si una ganadora se ve involucrada en hechos delictivos puede perder su premio. Gill además del reconocimiento ganó una beca de dos mil dólares.