La empresa automotriz alemana Audi demandó a su par Volkswagen tras conocerse el escándalo sobre la manipulación de los software en los vehículos.
Según informó un vocero de la entidad, el objetivo de la instancia judicial es "contribuir al proceso de esclarecimiento" del caso, el cual trajo como consecuencia la adulteración de los sistemas en 11 millones de vehículos a nivel mundial.
Dentro de esta cifra, al menos 2,1 millones corresponderían a automóviles Audi, 5 millones Volkswagen y el resto en marcas afiliadas.
Tras el estallido del caso, la industria alemana se vio claramente afectada, mostrando bajas en las diversas bolsas de comercio, situación que se podría agravar en caso de mantenerse el problema.
"No vamos a tolerar ninguna práctica que viole los valores y legislación vigentes", sentenció el portavoz.