Tras tres años de debate, la polémica propuesta de la ONG belga “Corvia” de habilitar un buzón para abandonar bebés, recibió autorización por parte del Consejo de Estado.
El buzón fue instalado por primera vez el 2017 en Evere, sin embargo, el alcalde de ese entonces, Pierre Muylle, emitió una orden prohibiéndolo, con el argumento de que se estaría alentando a las mujeres a abandonar a sus bebés.
"Corvia no quiere incitar en absoluto el abandono infantil, pero quiere ofrecer a las madres que desesperadas quieren dejar atrás a su recién nacido, la posibilidad de poner a sus hijos en un lugar seguro", habrían dicho desde Corvia ese año, según constata The Brussels Times.
El 2017 el caso fue llevado al Consejo de Estado, donde la medida fue prohibida. No obstante, fue la misma entidad la encargada de revocar el fallo inicial.
La ONG se encuentra en conversaciones con el actual alcalde de la ciudad, Ridouane Chahid, quien afirmó que “prefiero que un niño termine en un lugar donde tiene un futuro que quedarse atrás en alguna parte”.
De acuerdo con lo que informa Corvia en su sitio web, el buzón se encuentra disponible a cualquier hora y todos los días. La madre sólo tendrá que empujar una “pequeña puerta verde”, donde podrá poner a su bebé en un “nido” calefaccionado.
El primer “buzón de bebés” fue instalado en la ciudad de Amberes, Bélgica, hace 20 años, y ha sido utilizado 18 veces desde su instalación.