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Aviones de EE.UU. bombardean a EI cerca de Kobane para ayudar a kurdos

Naves de combate y bombarderos realizaron ocho ataques sobre esa ciudad del norte de Siria, alcanzando a seis vehículos, un edificio y varias posiciones del Estado Islámico.

José Morgado

Miércoles 29 de octubre de 2014

Aviones estadounidenses reanudaron sus ataques contra el grupo Estado Islámico (EI) cerca de Kobane (Siria), mientras soldados kurdos iraquíes se preparan para reforzar a tropas kurdas locales en esta zona fronteriza, informó el comando estadounidense el miércoles.

Aviones de combate y bombarderos estadounidenses realizaron ocho ataques entre martes y miércoles sobre esa ciudad del norte de Siria, alcanzando a seis vehículos, un edificio y varias posiciones del EI, dijo el comando central para Medio Oriente (Centcom) en un comunicado.

En Irak, drones y aviones estadounidenses realizaron seis bombardeos, tres cerca de Sinjar en el norte y tres cerca de Fallujah, al oeste de Bagdad, detalló.

La última ofensiva aérea fue lanzada cuando tropas "peshmerga" (combatientes kurdos) fuertemente armadas estaban próximos a cruzar la frontera turca hacia Kobane, para ayudar a sus pares de la milicia kurda local, que ha resistido el asalto implacable de los yihadistas del EI durante semanas.

Bajo gran presión de Estados Unidos, Turquía anunció la semana pasada que dejaría pasar por su territorio a combatientes de la provincia autónoma kurda de Irak para unirse a las milicias que defienden Kobane. Oficiales kurdo-iraquíes dijeron que cerca de 200 combatientes fueron enviados. 

A su vez, los rebeldes del Ejercito Libre sirio (FSA) ya cruzaron desde Turquía hacia Kobane este miércoles.

La portavoz del Departamento de Estado Jen Psaki dijo que Washington ha recibido  información de que combatientes del FSA estaban cruzando la frontera.

"Damos la bienvenida a la ayuda que proporcionarán a la defensa de Kobane", dijo Psaki a periodistas, agregando que los funcionarios en el terreno deben confirmar la finalización de la operación.

Kobane se ha convertido en un símbolo de la batalla contra el EI, una agrupación extremista sunita musulmana que se ha apoderado de extensos territorios en Siria e Irak y que declaró un califato islámico.

El ejército estadounidense ha lanzado decenas de bombardeos en los alrededores de Kobane en las últimas semanas para respaldar a los combatientes kurdos que resisten en la localidad.