El informe es categórico: las tasas de desempleo de las mujeres son más altas que las de los hombres a escala mundial. Por eso, la ex presidenta Michelle Bachelet, en su rol de directora de ONU Mujer, denunció en América Latina el desafío de la exclusión está ligado con la pobreza.
La ex mandataria indicó en el documento "Tendencias Mundiales del Empleo de las Mujeres 2012" publicado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que "desde el punto de vista de la igualdad de género, América Latina ha avanzado bastante, pero tiene importantes desafíos ligados a la pobreza".
El texto, que analizó las desigualdades de género en materia de desempleo, empleo, participación de la fuerza de trabajo, vulnerabilidad, y segregación sectorial y profesional, reveló, además que la crisis económica mundial revirtió el el estancamiento en las desigualdades laborales entre hombres y mujeres que existía en las zonas más golpeadas por los problemas financieros.
Por esto, Bachelet advirtió que "si bien las mujeres contribuyen a la economía y a la productividad en todo el mundo, siguen enfrentando muchos obstáculos que les impiden realizar su pleno potencial económico. Esto no sólo inhibe a las mujeres, además frena el rendimiento económico y el crecimiento".
Agregó, además que "garantizar la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres no sólo es una medida justa, es también una estrategia económica rentable".
En cifras, en las economías desarrolladas, el empleo de las mujeres en la industria se redujo a la mitad, desplazando a 85% de ellas en los servicios, sobre todo en la educación y la salud.
