Luego que el presidente de Uganda, Yoweri Museveni, aprobara una legislación que criminaliza la homosexualidad, el Banco Mundial, decidió castigar la controversial normativa y suspendió la entrega de una millonaria ayuda al país africano.
Tras las presiones del partido Demócrata del Congreso de los Estados Unidos, la entidad financiera internacional pospuso un préstamo de 90 millones de dólares destinado para proyectos médicos.
De acuerdo al Banco Mundial, la suspensión del préstamo será hasta que se comprueba que la nueva legislación no interfiere con el sistema de salud ugandés.
La polémica legislación, propone penas de cárcel para aquellos que sean descubiertos manteniendo relaciones homosexuales y lesbianas dentro del país.
Luego de ser firmada la normativa, en Uganda, comenzó una verdadera "caza de brujas" para encontrar y enjuiciar a todas le personas que no tienen una opción sexual heterosexual. Incluso, fueron publicados sus nombres en las portadas de algunos periódicos conservadores que contribuyeron a la búsqueda de los gays ugandeses.
La resolución del Banco Mundial, es la primera de una serie de posibles represalias económicas contra Uganda por culpa de la extrema ley anti homosexuales.