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Cepo a los turistas

Autoridades obligan a las agencias a declarar contratos y prestaciones realizadas en el exterior.

Mariángel Calderón

Viernes 12 de octubre de 2012

Aunque la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, no admita el "cepo al dólar", las autoridades transandinas continúan dando pruebas de su existencia.

Ahora, la Administración Federal de Ingresos Públicos incorporó a la medida del control de la divisa, en la que se fiscaliza las prestaciones se servicios efectuadas por sujetos del exterior a residentes en el país y por prestadores residentes a sujetos en el exterior, a las agencias de turismo.

La resolución 3.276 obliga a a las personas que contraten un servicio turístico a declarar la información referida a los pasajes correspondientes a viajes en buques o aeronaves, así como a los gastos de turismo y viajes por servicios contratados al exterior concertados por operadores turísticos que actúan en el país.

Todos los datos pedidos, deben ser declarados en la "Ventanilla Única Electrónica del Comercio Exterior", una herramienta que contiene los datos entregados por los declarantes.

Según publicó el diario Clarin, las agencias de viajes deben consultar a sus abogados respecto al alcance que tiene la nueva medida. Sin embargo, especulan que los pasajeros tendrán que declarar cada uno de los destinos y el monto de dólares que levarán con ellos.

Además del "cepo al dólar" que está afectando al turismo, las trabas a las importaciones también están mermando la industria del fiambre. Las prohibiciones ahora tendría consecuencias negativas en la producción de salchichas, salamines, salchichones y mortadelas.

Según informaciones recogidas por el diario La Nación, el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, hace un mes que está impidiendo la importación de tripas artificiales, claves para el envase y la preservación de los embutidos.

La negativa situación económica que vive el país, ya fue advertida por el Fondo Monetario Internacional (FMI), que señaló que Argentina no crece debido, precisamente, al cepo al dólar y a las trabas en las importaciones.

En su informe sobre las Perspectivas Económicas para América Latina y el Caribe, la entidad sostuvo que el país vecino atraviesa una "desaceleración brusca del crecimiento". Esta situación, además de estar motivada por la baja demanda de productos argentinos de Brasil, se debe a que "las restricciones a las importaciones y a las operaciones cambiarias están afectando negativamente a la inversión y la confianza del consumidor".

Según el FMI, el panorama podría cambiar si se toman medidas para "proteger a los grupos vulnerables dentro de los recursos presupuestarios disponibles, preferiblemente mediante transferencias monetarias focalizadas, evitando subsidios de precios generalizados, que pueden tener un alto costo fiscal y generar distorsiones".