Según la División de Población del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU, Chile es el país de Sudamérica donde más ha crecido el número de inmigrantes entre 1990 y 2013, pasando de 107.501 en 1990 a 398.251 en 2013.
En el ranking de la región, lo siguen Ecuador, Argentina y Venezuela. Mientras que en Brasil - en un período de tiempo de 13 años- cayó el número de extranjeros de 798.517 a 599.678.
A nivel mundial, el informe de las Naciones Unidas destaca que en la actualidad hay más personas que nunca viviendo fuera de su país de origen. Sin embargo, en este estudio se presenta una tendencia histórica que se basa en un aumento de personas de países desarrollados en lugares con sistemas en desarrollo.
La corriente migratoria desde el norte hacia el sur estuvo protagonizada por personas que se trasladaron desde Estados Unidos hacia México y Sudáfrica, desde Alemania a Turquía, desde Portugal hacia Brasil, y desde España a Chile.
Contrariamente a lo que podría creerse, las conclusiones del informe postulan que los migrantes que se desplazan del sur al norte consideran que viven en peores condiciones en comparación a las de las personas que han permanecido en su país o en su región.
Asimismo otro dato importante a considerar, es que la cantidad de personas que deciden emigrar es mayor en países del norte (entre el 3,6% y el 5,2% de la población) que en los del sur (alrededor del 3 por ciento).