La tarde de este jueves, el jefe negociador del Gobierno de Colombia, Humberto de la Calle y la delegación de las Fuerzas Armadas Revolucionarios de Colombia (FARC) ofrecieron la primera conferencia de prensa en el inicio del proceso de paz que ambos llevan luego de 50 años de conflictos, en el pueblo de Hurdal, cercano a Oslo, capital de Noruega.
Si bien, ambas partes compartieron los deseos de paz para el país cafetalero, en la misma rueda de prensa quedaron claras las diferencias que las partes van a tener que superar si es que quieren lograr un acuerdo entre ellos. La tensión era evidente y sus planteamientos se ven muy lejanos unos de otros.
El principal punto planteado por el grupo armado en este proceso, es el modelo económico implantado en Colombia, similar al modelo capitalista que existe en Estados Unidos o Chile, el cual es profundamente rechazado por ellos.
Sin embargo, el Gobierno de Juan Manuel Santos dijo desde antes no estar dispuesto a realizar algún cambio en el sistema de mercado en Colombia, punto que -seguramente- va a ser motivo de desencuentro en el proceso de paz.
De la Calle recalcó el hecho de que el modelo económico no está en discusión, "Quiero reiterar a propósito de la cuestión minero energética (punto planteado por los revolucionarios) que no estamos discutiendo el modelo de desarrollo económico, no estamos discutiendo la inversión extranjera", dijo el jefe del equipo del Gobierno.
Además señalo que "para que eso se discuta en la agenda colombiana las FARC tienen que dejar las armas, hacer política y ganar las elecciones, pero en este momento eso no hace parte de la mesa”.
El delegado del Gobierno destacó que ellos no pretenden “evangelizar” al grupo rebelde quitándoles las armas y deponer sus ideas, sino que luche por ellas pero sin sangre y con democracia.
Por la otra parte, el líder de las negociaciones de las FARC, Iván Márquez, en la conferencia, dijo que los ideales del grupo por los que han luchado desde su origen se mantienen inalterados, además de dejar en claro que "la paz no implica el silencio de los fusiles, hace falta más".
Márquez señaló que “la locomotora minero energética es como un demonio de destrucción socio ambiental que si el pueblo no la detiene en menos de una década convertirá a Colombia en un país inviable", además sostuvo que "en Colombia no hay economía nacional, quienes exportan el petróleo, el carbón, el ferroníquel, el oro y se benefician con ellos son las multinacionales, la prosperidad entonces es de estas y los gobernantes vendidos, no del país".
En la rueda de prensa que se dio posterior a la mesa de dialogó, los líderes de las FARC cerraron su conferencia criticando el sistema económico capitalista, centrando como eje de discusión, el ejemplo de la reforma agraria, que dio origen el grupo armado en la década de los 60. También citando a Simón Bolívar y poemas de Pablo Neruda.
En 1999, el Gobierno del Presidente Andrés Pastrana había sido el último en intentar dialogar con las FARC, con nulos resultados.
La próxima mesa de conversaciones será el 15 de noviembre en Cuba.