Entre los cardenales que asoman como posibles "papables" hay una gran variedad de estilos y la clasificación formal los divide entre conservadores y liberales dentro de cánones religiosos.
Con 67 años, Christoph Schönborn es uno de los candidatos europeos no italianos- oriundo de República Checa- que podría suceder a Benedicto XVI y que figura entre los conservadores, aunque su nombre suena en segunda línea para el cónclave.
Es políglota y un gran teólogo. Está en contra del aborto, la eutanasia y la ordenación de la mujer.
Tuvo una participación destacada en la redacción del Catecismo de la Iglesia Católica y reconocida es su capacidad intelectual.
Ha escrito obras como "El ícono de Cristo" y "Fundamentos de nuestra fe", es arzobispo de Viena y pertenece a la alta sociedad checa.
Uno de los acontecimientos críticos de su trayectoria ocurrió en 2010 cuando hizo una fuerte crítica al también cardenal Ángelo Sodano, de ofender a las víctimas de abuso sexual tras un discurso en Domingo de Ramos.
En esa oportunidad el Papa Benedicto XVI salió al paso para recordarle a Schönborn que sólo el Sumo Pontífice puede criticar a los cardenales.
Considerado como uno de los moderados también estuvo su nombre como posible sucesor de Juan Pablo II.
Es uno de los cardenales de confianza del ahora Papa Emérito, Joseph Ratzinger.