Este lunes efectivos de la fuerza policial de Italia junto con la Fiscalía de dicho país lograron la detención del jefe de emergencias del hospital de Montichiari, Carlo Mosca, acusado de administrar "fármacos letales" a pacientes internados por COVID-19 con la intención de liberar cámaras críticas.
De acuerdo con los investigadores, el médico que llevaba a cargo de las urgencias del recinto desde septiembre de 2018, habria administrado intencionalmente medicamentos adecuados para causado depresión respiratoria letal a algunos pacientes contagiados de coronavirus, causándole la muerte a dos hombres de Brescia de 61 y 80 años, según informó Brescia Today.
Mosca se encuentra bajo arresto domiciliario en su vivienda en Mantua y ha sido suspendido de su cargo ya que, según autoridades, existe la posibilidad de que el sujeto pueda repetir los crímines.
"Es muy probable que decida administrar drogas prohibidas a los pacientes más graves, con el fin de acelerar su muerte, falsificando los datos contenidos en las historias clínicas", indicó la justicia para explicar el arresto de Mosca.
La investigación de las muertes
Estos crímenes llegaron a oídos de la justicia durante el mismo abril del año pasado a través de una denuncia anónima que llegó a Fiscalía, donde se descubrió que en las historias clínicas de los fallecidos durante el mes de marzo, no se incluyó un fármaco anestésico y un relajante muscular comúnmente utilizado para la intubación y sedación de los pacientes.
Cabe mencionar que debido a esta omisión también se acusa a Mosca de "falsificación de documento público".
Otra arista investigada por las autoridades son la serie de conversaciones que sostuvieron enfermeras a través de un chat donde tildaban al detenido como un "loco" y donde también develaban la intención del médico para "matar pacientes con la intención de liberar las camas del hospital".
En ese sentido, la jueza Ángela Corvi confirma dicha hipótesis al atribuirle no solo la intención de liberar las camas, sino también "recursos humanos, físicos y emocionales" de los profesionales de la salud.
A los fallecidos, Natale Basi de 61 años y Angelo Paletti de 80 años, existe la sospecha de un tercer fallecido por el actuar del profesional, pero que lamentablemente no se podrá investigar puesto que ya fue cremado.
Por su parte Mosca asegura que todas las acusaciones son infundadas.
Recordar que Italia ya acumula 2.485.956 contagios desde que comenzó la emergencia sanitaria en febrero de 2020 y se han registrado 86.422 víctimas mortales.