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Cumbre acaba sin Declaración Conjunta

Por primera vez en la historia, Latinoamérica se opuso en bloque a la exclusión de Cuba de la Organización de Estados Americanos (OEA), lo que generó el rechazo de Estados Unidos y Canadá, haciendo fracasar la declaración final conjunta del foro.

24Horas.cl TVN

Domingo 15 de abril de 2012

Los desacuerdos entre América Latina y Estados Unidos sobre la política norteamericana hacia Cuba hicieron naufragar la Cumbre de las Américas y mostraron como Washington sigue perdiendo influencia en una región en la que está cada vez más aislado.

Por primera vez en la historia, Latinoamérica se opuso con una voz única a la exclusión de Cuba del foro hemisférico de la Organización de Estados Americanos (OEA), que expulsó a la isla de Gobierno comunista de sus filas en 1962 por no cumplir con los principios de la Carta Democrática.

Pero Estados Unidos, que mantiene un embargo comercial desde hace medio siglo sobre la isla, junto con Canadá, rechazó la iniciativa. Eso impidió que los países reunidos en la caribeña ciudad colombiana de Cartagena pudieran adoptar una declaración final.

"El hecho de que no haya declaración no es un fracaso, todo lo contrario", dijo el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, durante una conferencia de prensa de cierre de la cumbre, intentado rescatar un lado positivo del encuentro.

Santos resaltó que al menos todos los países se sentaron a discutir por primera vez temas que en otras cumbres fueron tabú, como alternativas en la lucha contra las drogas y la situación sobre Cuba.

Estados Unidos se opone a la participación de Cuba en la Cumbres de las Américas, argumentando que La Habana no ha hecho mejoras democráticas y políticas significativas para reintegrarse a la OEA.

La cumbre fue un golpe para Obama, que en el encuentro buscaba profundizar el comercio con la región para recuperar empleos en Estados Unidos.

En cambio, en los dos días de reuniones escuchó reclamos de un mayor rol de Washington en la lucha contra las drogas y críticas de Brasil a sus políticas de estímulo económico.

Para empeorar las cosas, tuvo que lidiar con un escándalo de prostitución que involucró a 16 miembros de su equipo de seguridad y que el sábado fue el tema que opacó a la cumbre.

Ante los desacuerdos, algunos presidentes volvieron antes a casa. Cristina Fernández, de Argentina, regresó a Buenos Aires antes de que concluyera el evento y el presidente Ollanta Humala voló a su país la noche del sábado para tratar asuntos internos.

Fernández partió molesta, según algunos medios, después de que algunos presidentes dijeran que no se logró poner en el papel ningún apoyo al reclamo argentino de soberanía sobre las Islas Malvinas.

No obstante, Santos dijo a periodistas al cierre de la cumbre que la partida anticipada de Fernández le fue notificada previamente.