Los enfrentamientos entre manifestantes y autoridades que se han producido este domingo en Egipto suman ya 18 personas fallecidas y otras 781 heridas.
Miles de personas tomaron la calle en distintas protestas por todo el país para reclamar la dimisión del presidente Mohamed Mursi.
Entre las víctimas mortales figuran al menos nueve personas fallecidas durante el asalto contra la sede de los Hermanos Musulmanes en El Cairo, según informó la agencia estatal MENA. Decenas de manifestantes irrumpieron en la sede de la organización de la que procede el actual presidente, y saquearon el edifico.
Los miembros de la organización que se encontraban en el interior intentaron defenderse abriendo fuego contra las personas congregadas. Los manifestantes respondieron lanzando piedras y cócteles molotov. Otras 45 personas resultaron heridas durante este asalto.
Las protestas, organizadas por la oposición a Mursi, ha dado un ultimátum al presidente para que abandone el poder.
“Damos a Mursi hasta las 17.00 horas (hora local) del martes 2 de julio para abandonar el poder, permitiendo así a las instituciones del Estado que preparen elecciones presidenciales anticipadas”, señala en un comunicado el movimiento Tamarrud. De lo contrario, amenazaron con comenzar una campaña de desobediencia civil.
"En modo alguno aceptaremos medias tintas. No hay otra alternativa que el final pacífico del poder de los Hermanos Musulmanes y su representante, Mohamed Mursi", añadía el comunicado.
DIMISIÓN DEL GOBIERNO
En medio de este clima de protestas, los ministros egipcios de Turismo, Parlamento, Telecomunicaciones y Medio Ambiente han presentado este lunes su dimisión, según han informado fuentes gubernamentales.
Los titulares de Turismo, Hisham Zaazu; Telecomunicaciones, Atef Helmi; Asuntos Parlamentarios, Hatem Bagato; y Medio Ambiente, Jaled Fahmi, entregaron sus cartas de dimisión al primer ministro, Hicham Qandil.