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Fundador de Megaupload acude a los tribunales para impedir su extradición a EE.UU

Kim Dotcom acudió a la justicia de Nueva Zelanda para impedir ser juzgado en Estados Unidos por cargos como el crimen organizado, blanqueo de dinero, entre otros delitos.

Jorge Miranda

Lunes 21 de septiembre de 2015

El emprendedor tecnológico alemán Kim Dotcom se presentó el lunes en los tribunales de Nueva Zelanda tras casi cuatro años de disputas legales, en una audiencia para determinar si enfrentará cargos por violación de derechos de autor y otros en Estados Unidos.

El caso resolverá si Dotcom, fundador de la web de intercambio de archivos Megaupload, y otros tres ejecutivos pueden ser extraditados a Estados Unidos. Otros cargos incluyen el crimen organizado y el blanqueo de dinero.

"El caso no es sólo sobre mí. Es sobre cuánto control permitimos que tengan las empresas y el Gobierno de EEUU sobre Internet", dijo Dotcom en Twitter antes del comienzo de la audiencia.

Vistiendo una gorra y gafas de sol, Dotcom aparcó fuera del juzgado su Mercedes con matrícula "KIM.COM". Decenas de policías vestidos de negro, trabajando en cooperación con el FBI, registraron su mansión en Nueva Zelanda en 2012 y desde entonces las disputas legales han continuado.

Las autoridades de EEUU dicen que Dotcom y otros tres ejecutivos de Megaupload han costado a las empresas cinematográficas y a los estudios más de 500 millones de dólares y han generado más de 175 millones de dólares al alentar a los usuarios a almacenar y compartir material con derechos de autor, como películas y series de televisión.

Dotcom saludó a sus seguidores en la galería, pero se sentó apartado de los otros acusados en un sillón de cuero que llevó a la corte desde su mansión. La semana pasada, había dicho a la radio de Nueva Zelanda que necesitaba una silla especial por sus problemas de espalda.

El caso está siendo seguido de cerca por la industria de medios y los desarrolladores en el negocio de intercambio de archivos para buscar señales de hasta dónde está dispuesto a llegar Washington para proteger los derechos de propiedad intelectual en Estados Unidos.

Se espera que la audiencia se prolongue durante dos semanas. La sesión del lunes fue en gran parte procesal y el caso se reanudará el jueves.