El Gobierno de Colombia y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) acordaron el lunes un cese bilateral al fuego de 102 días a partir del 1 de octubre, el primer logro concreto en la negociación de paz que mantienen para acabar definitivamente un conflicto interno de más de medio siglo.
Es la primera vez en la larga y violenta confrontación que el ELN, integrado por unos 2.000 combatientes, acuerda un cese bilateral con un gobierno.
Un acuerdo definitivo con el ELN, considerado una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, le permitiría al país sudamericano una paz más estable y completa, tras el pacto que firmó el presidente Juan Manuel Santos con las FARC en el 2016.
"Entrará a regir el próximo primero de octubre, tendrá una vigencia inicial de 102 días, es decir irá hasta el 12 de enero del próximo año y se irán renovando en la medida en que se cumpla y se avance en las negociaciones", dijo Santos en una declaración desde la sede de la Presidencia.
El mandatario sostuvo que la guerrilla suspenderá los secuestros, los ataques a los oleoductos y demás hostilidades contra la población civil.
"¡Sí se pudo! Agradecemos a todas y todos quienes apoyaron decididamente los esfuerzos para alcanzar este Cese al fuego bilateral", dijo por su parte el grupo rebelde en su cuenta de Twitter.
El anuncio de las partes se produce dos días antes de la llegada del Papa Francisco a Colombia en medio de la división que ha provocado el acuerdo de paz con la antigua guerrilla izquierdista de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ahora convertida en un partido político.
El Sumo Pontífice llegará al país con un mensaje de reconciliación, fe y unidad para quienes se resisten a perdonar e integrar a la sociedad a los antiguos combatientes rebeldes de las FARC.
El ELN -acusado de secuestros, asesinatos, ataques a la infraestructura económica del país, así como de extorsiones a multinacionales petroleras y mineras- surgió en 1964 inspirado en la revolución cubana con el apoyo de sacerdotes católicos radicales.
El Gobierno de Colombia y el grupo guerrillero comenzaron en febrero en Quito una negociación de paz después de más de tres años de conversaciones exploratorias en las que se definió una agenda.
El ELN mantuvo en el pasado negociaciones con otros gobiernos, pero fracasaron por las posiciones radicales del grupo para avanzar en el abandono de las armas.
Santos, quien asumió la presidencia en el 2010, ha apostado su capital político para lograr la paz y acabar con el conflicto armado. Los esfuerzos del mandatario fueron reconocidos con el Premio Nobel de la Paz.