La precandidata estadounidense y favorita demócrata Hillary Clinton habló este lunes con trabajadores siderúrgicos sobre sus problemas económicos en la región de los Apalaches, un intento por llegar a votantes de clase obrera en una parte del país donde es fuerte el respaldo al republicano Donald Trump.

Centrando su atención en un posible choque con Trump para las elecciones presidenciales del 8 de noviembre, Clinton se reunión con líderes sindicales y algunos de los 600 trabajadores que fueron despedidos el año pasado cuando AK Steel Holding Corp anunció que cerraría una planta en la zona oriental de Kentucky.

En el inicio de su gira por la región, la precandidata dijo que las pérdidas laborales en la industria manufacturera y del carbón en el área habían sido un duro golpe. "Está devastando comunidades", afirmó Clinton a los trabajadores sentados a una mesa de un restaurante italiano en la localidad de Ashland.

La gira de Clinton incluirá eventos en Virginia Occidental y Ohio.

Clinton tiene una amplia ventaja sobre el senador Bernie Sanders para la nominación demócrata, e intenta ganar el apoyo de simpatizantes de Trump. El magnate y otros republicanos han acusado al Gobierno del presidente Barack Obama de realizar una "guerra contra el carbón" al imponer estrictas normas medioambientales.

Partes de los Apalaches, una región que abarca varios estados en el este de Estados Unidos, han registrado altos niveles de pobreza y despidos. Si gana la nominación demócrata, la zona será un desafío difícil para Clinton.

La última vez que Virginia Occidental votó por un candidato presidencial demócrata fue en 1996, cuando Bill Clinton se postuló a su segundo mandato de cuatro años. El ex presidente Clinton es el único demócrata que ha ganado en Kentucky desde 1980.

En su primera precandidatura presidencial, Hillary Clinton derrotó a Obama en las primarias de 2008 en esos estados, pero perdió la nominación ante el actual presidente.

Fuente y foto: Reuters

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