Una joven de sólo 24 años perdió la vida luego de quedarse atrapada en una máquina utilizada para tratamientos de crioterapia, práctica que se centra en enfriar el cuerpo para provocar placer y relajo, pero sólo debe aplicarse por dos o tres minutos.
Chelsea Ake, sin embargo, pasó más de diez horas al interior del aparato y su cadáver fue encontrado por sus compañeros de trabajo la mañana de este domingo.
Ake era la gerente del centro de tratamientos cosméticos Rejuvenice en Henderson, Nevada, en Estados Unidos. Según indicaron algunos testigos a la cadena NBC, los trabajadores de ese recinto no sabían que ella cerraría sola el local la noche del sábado.
Así declaró su amiga Shae-Lynn Bee, quien pensó que la joven estaba con otras personas al interior del centro estético. "Era mi mejor amiga, la voy a extrañar mucho", dijo Bee al medio de televisión.
Aún no está claro si Chelsea murió por falta de oxígeno al interior del aparato o si su fallecimiento fue provocado por la extremas temperaturas que puede alcanzar una máquina de crioterapia, las que pueden llegar incluso a -120°C.
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