Los estadounidenses se recuperan a estas horas del último susto que llegó desde el cielo. Residentes de los estados de California y Nevada vieron cómo una bola de fuego surcó el aire. Incluso, las centralitas de la policía local se colapsaron por llamadas de personas que habían escuchado una gran explosión.
Los astrónomos creen que se trató de un meteorito que entró con gran violencia en la atmósfera terrestre. Los numerosos avistamientos se produjeron en una franja de mil kilómetros a ambos lados de la cordillera de Sierra Nevada. Las ciudades que más testimonios generaron fueron Las Vegas (Nevada) y San Francisco y Sacramento (California).
Por la red circula un video en el que presuntamente se ve cómo el bólido pasa rozando a dos personas que estaban grabando el fenómeno desde su auto.