Una mujer en Escocia narró los complejos efectos secundarios sufridos tras inyectarse la vacuna de AstraZeneca contra el coronavirus, donde su cara, manos y piernas registraron salpullidos y manchas.
Leigh King, oriunda de Wishaw en North Lanarkshire, explicó al medio Wishaw Press que la situación que debió enfrentar "es el peor momento de mi vida", donde hasta su hijo evitaba acercarse por miedo a las reacciones.
"Mi piel estaba muy adolorida y constantemente caliente. Nunca había sentido un dolor así, ha sido una experiencia horrible", contó.
Asimismo, destacó que ella fue inoculada el pasado 12 de marzo, estando completamente sana y sin ser alérgica a medicamentos.
"Solo recibí la vacuna porque cuido de mi hijo, que tiene autismo y problemas de movilidad", añadió.
King afirmó que en primera instancia los hospitales no quisieron atenderla, pero que los contantes dolores la obligaron a persistir en una atención.
Desde el Servicio Nacional de Salud británico (NHS, por sus siglas en inglés) aseveraron que este tipo de efectos tras la vacuna corresponde a casos "muy raros" y que "no se han informado complicaciones a largo plazo".
"Cualquier vacuna contra el coronavirus que se apruebe debe pasar por todos los ensayos clínicos y controles de seguridad por los que pasan todos los demás medicamentos autorizados", sentenció el organismo.