Un día después que declarara su hijo, el magnate de las comunicaciones Rupert Murdoch, dueño del grupo mediático News Corporation, presta declaración por primera vez ante la comisión que investiga el caso de las escuchas ilegales de la presa británica.
La comparecencia se produce en medio de la polémica que se generó ayer con las declaraciones del hijo del empresario, James Murdoch, quien enfrentó la publicación de documentos que vinculaban al gobierno de David Cameron, principalmente al ministro de Cultura, Jeremy Hunt, con la aprobación del plan de News Corporation de controlar la plataforma digital de la empresa BSKyB, de la que ya poseía el 39% de las acciones.
En julio del año pasado, James y Rupert Murdoch declararon ante la Comisión de Cultura, Deportes y Medios de Comunicación de las Cámara de los Comunes, donde negaron haber tenido constancia del alcance del espionaje que se efectuaba en su grupo empresarial. En la misma jornada un hombre atacó al magnate nacido en Australia con un tortazo en la cara.