El número de muertos por el derrumbe de una torre en una planta termoeléctrica de Corea del Sur aumentó a cinco, después de que los equipos de rescate recuperaron los cadáveres de dos trabajadores, mientras continúan las operaciones de búsqueda de otras dos personas todavía sepultadas bajo toneladas de escombros.
Las autoridades hallaron, entre la pasada noche y esta mañana, dos cadáveres después de que las autoridades surcoreanas dinamitaran dos torres cercanas al lugar del accidente que dificultaban las labores de rescate, informó la agencia de noticias local Yonhap.
El medio indicó que las labores de búsqueda continúan casi una semana después del derrumbe, ya que otros dos trabajadores continúan atrapados. Uno de ellos fue localizado bajo los escombros, aunque los equipos de rescate lo dan por muerto al no haber detectado señales de vida, mientras que la ubicación exacta del otro sigue siendo desconocida.
El accidente tuvo lugar el pasado jueves, cuando una torre de 60 metros de altura en la planta termodinámica de Korea East-West Power Co, se derrumbó, atrapando a nueve trabajadores en su interior. Dos de ellos fueron rescatados con vida inmediatamente después del accidente.
Los servicios de emergencia lanzaron el jueves una operación de búsqueda que afronta ahora su fase final tras pasar lo que denominan los expertos como la fase crítica de 72 horas, después de que las posibilidades de encontrar a supervivientes se reducen drásticamente.