El Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, se refirió a la reunión de emergencia que tuvo con el líder del Partido Demócrata, Harry Reid, y su par republicano Mitch McConnell, la que debió realizar apenas regresó de sus interrumpidas vacaciones en Hawaii.
"Podríamos llegar a un acuerdo a tiempo", señaló el mandatario, quien también agregó que "los americanos no tendrán paciencia por una decisión política tardía".
Según la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien también estuvo presente en el Salón Oval, la negociación habría tenido avances y se realizó en términos muy cordiales.
"Quiero insistir que tuvimos una reunión muy constructiva el día de hoy. Los senadores Reid y McConell están discutiendo un potencial acuerdo el cual se resolverá en una negociación bipartidista en el Senado para luego ser promulgado por la Casa Blanca y terminar esto antes del 31 de diciembre", señaló.
Por su parte, Mitch McConnell coincidió con Barack Obama en su optimismo de que se hará lo posible por llegar a un acuerdo en el Congreso para aprobar la propuesta presidencial.
El punto de tope es la idea de Obama de mantener el recorte impositivo a quienes perciban ingresos de hasta 250.000 dólares (119 millones de pesos chilenos, aproximadamente).
Los republicanos, por su parte, desean aplicar el recorte a la totalidad de las personas que tributan, incluyendo a los más ricos.
Sin embargo, luego de esta reunión entre los partidos más importantes del país del norte, Obama dijo que "nadie ganará el todo el por el todo (ni demócratas ni republicanos) pero nos aseguraremos de que las clases medias no sufran con una eventual subida de impuestos".
Se teme que el llamado "abismo fiscal" provocado por el cumplimiento de la prórroga de la carga impositiva, que vence este 31 de diciembre, podría empujar a EE. UU. a una nueva recesión, lo que ha generado caídas en el valor de las acciones en los mercados europeos y estadounidenses.