La Fiscalía General de Rusia, informó este jueves que pedirá explicaciones a Estados Unidos por la muerte de un menor ruso adoptado por una pareja norteamericana.
El pequeño, Maxim Kuzmin, de tres años, habría sido asesinado por su madre adoptiva, quien habría mantenido un trato negligente con el menor.
De acuerdo a la versión de la mujer norteamericana, el pequeño estaba jugando en el jardín cuando se desmayó. Sin embargo, trascendidos indicaron que Maxim sufría golpes y era medicado con fuertes narcóticos por su madre.
La muerte del menor generó una gran polémica en Rusia y provocó que la fiscalía pidieran antecedentes del caso a las autoridades norteamericanas. Hasta el momento, se esperan los resultados de la autopsia para comenzar las investigaciones.
Un reconocido abogo defensor de los derechos de los niños rusos, dijo que la madre adoptiva del pequeño deberá enfrentar cargos penales, ya sea por asesinato o por negligencia.
El pequeño Maxím Kuzmin, falleció el pasado 18 de febrero en el estado de Texas.
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