En medio del brote del covid-19 que ha infectado a más de 45.000 personas en 26 países, tres pacientes lograron burlar la seguridad de la cuarentena que estableció Rusia por los casos y sospechas del virus, logrando escapar. Se trata de dos mujeres rusas que eran mantenidas aislada por un posible contagio. La primera saltó por la ventana de un hospital, estando embarazada, junto a su hijo, mientras que la otra desactivó una cerradura electrónica.
Ambas se quejaron de las malas condiciones y los pésimos tratos a los que eran sometidas, además de tener miedo de contraer, efectivamente, el virus. Las autoridades sanitarias rusas no se han referido a estas quejas, según publicó Time.
En Rusia solo se han notificado dos casos confirmados de covid-19, sin embargo, las autoridades tomaron amplias medidas preventivas ante la posible propagación del virus y hospitalizaron a cientos de personas que regresaron de viajes a China solo como precaución. Muchos pacientes reclamaron de las pésimas condiciones de las salas de aislamiento y a falta de cooperación de los médicos respecto de los protocolos de cuarentena.
La primera mujer publicó en su cuenta de Instagram su versión de la historia, donde cuenta que su hijo tenía fiebre, por lo que llamó a urgencias y los llevaron a hacerse las pruebas de covid-19, sin embargo, las dos horas que se demorarían en entregarles los resultados se convirtieron en cinco días, y luego de enterarse que estaba embarazada, no tuvo más opción que saltar por la ventana junto a su pequeño.
La segunda mujer, también contó a través de sus redes sociales cómo fue su experiencia. Relató que tenía dolor de garganta por lo que llamó a los servicios de emergencia que la trasladaron a un hospital para tomarle pruebas de coronavirus con el compromiso de que podría irse a su casa 24 horas después. Al día siguiente le informaron que sus resultados dieron negativos, pero de igual forma la mantuvieron en cuarentena durante dos semanas.
Según contó a un medio local su sala de aislamiento era "terrible", sin libros ni Wi-Fi, sin útiles de aseo personal y con basura acumulada. Finalmente, descubrió cómo hacer cortocircuito a la cerradura electrónica de su puerta y escapó del hospital el viernes.
El recinto denunció la fuga de una de las mujeres el martes a la policía, en tanto, los efectivos visitaron a la primera mujer y decidieron no presentar cargos, mientras que a la segunda no la visitaron, llamaron, ni buscaron.
El miércoles, el diario nacional Fontanka publicó un video donde se ve a los pacientes de un hospital cantando "quiero ser como Alla", refiriéndose a Ilyna,una de las mujeres que logró escapar. Además, mostraron una nota manuscrita que recita: "salgamos de aquí, por favor".