En un comunicado difundido este martes, los talibanes afirmaron que la joven activista Malala Yousufzai merecía "morir" por haber "espiado para Occidente", por haber "difamado" a los muyahidines y por haber "idealizado al mayor enemigo del Islam".
Su defensa a la educación femenina no es lo que habría generado la irritación del pueblo talibán, sino que admiten haberla atacado "porque había hablado contra los talibán mientras se sentaba con los desvergonzados extranjeros e idealizaba al mayor enemigo del Islam, Barack Obama", agrega el comunicado.
Malala mejora
La joven pakistaní de 15 años, Malala Yousafzai, se recupera en el hospital del Reino Unido donde está recibiendo tratamientos y a la vez se programan cirugías reconstructivas, según indicó el director del centro médico, Dave Rosser.
La mejoría que Mala ha mostrado, tiene a los médicos "impresionados" por la "resistencia y fuerza" que han permitido un avance considerable estas últimas horas.
Si bien, la joven activista progresa en su estado de salud, será necesario que reciba cirugía reconstructiva para tratar las "horrendas heridas" que le provocaron los dos disparos recibidos en la cabeza y el cuello.
"Tenemos expertos internacionales en ese campo que han empezado a planificar las cirugías" aseguró Rosser, precisando que el paso por el quirófano forma parte del "tratamiento prolongado" que la menor recibirá para recuperarse "física y psicológicamente".
Desde que la menor está instalada en el Queen Elisabeth, el gobierno británico dispuso medidas de vigilancia y seguridad especiales a modo de protegerla. Justificadas, por cierto, dado que esta mañana varias personas fueron detenidas en la entrada del hospital cuando intentaron engañar a los guardias insistiendo que sí conocían a Malala.
Pese a que Rosser enfatizó en que la seguridad de la niña no corre riesgo debido a los mecanismos de seguridad que están a su cuidado, surgen dudas respecto a la intimidación proveniente de los talibanes.