Estados Unidos se quedó con la medalla de oro en el baloncesto olímpico tras vencer a Francia en la final del certamen.
Los norteamericanos se impusieron a los europeos por 87-82, en un duelo donde fueron dominadores.
El equipo comandando por Kevin Durant se impuso en tres de los cuatros tiempos del partido por 22-18, 22-21, 27-24 y 16-19.
De esta forma Estado Unidos extiende su amplia ventaja en la competición, alcanzando así su cuarta medalla de oro consecutiva y la número 15 en toda su historia.