El superior general de los padres de Schoenstatt, Juan Pablo Cattogio, habló en exclusiva con 24 Horas sobre la situación actual de Francisco José Cox, quien se encuentra en un acomodado refugio de la congregación en Alemania mientras es investigado por abusos sexuales por justicia chilena.
Consultado sobre las acusaciones contra el obispo emérito de La Serena, manifestó que las realizadas "las conocimos a través de la prensa, no hemos tenido ninguna notificación formal de la justicia. En Alemania, fue una denuncia que conocimos a fines del año pasado".
No obstante, reconoció en la década del 90 existieron ciertos antecedentes que lo llevaron a renunciar a la diócesis, hechos que "eran situaciones suficientemente serias para que renunciara, pero no para que se inicie una investigación".
Acerca de la existencia de un encubrimiento, Cattogio pidió que en este tipo de situaciones las acciones deben juzgarse por su contexto histórico.
"Hoy día, con esos mismo elementos, habría que abrir una investigación porque los criterios de la iglesia han ido madurando. Formalmente no hubo encubrimiento, porque no investigar sin la existencia de una denuncia formal no lo era", explicó.
También fue enfático en defender el precario estado de salud de Cox ante las dudas manifestadas por sus víctimas que lo vieron en la reciente entrevista dada a TVN en Alemania, estado que, asegura, lo incapacitan para declarar con lucidez, aunque aclaró que no negarán colaboración a la justicia.
"Invitaría a quien corresponde a que hagan un control externo y que certifiquen cuál es su condición actual. Hay una enfermera que va todos los días a darle sus remedios, tuvo un cáncer de próstata y es diabético. Que juzguen quienes saben hacerlo, tengo mis dudas de que alguna afirmación suya pueda ser coherente", sentenció.