Este 2015 las ballenas jorobadas se han tomado las costas del extremo sur de Chile, más específicamente en el estrecho de Magallanes y brindan un bonito espectáculo para las personas de ese lugar.
El investigador del Instituto Antártico Chileno, Anelio Aguayo, al ver las imágenes del cetáceo lo describe, "es de unos 14 metros de largo, debe tener no más allá de unos 20 años, por lo que tiene una larga vida para venir al estrecho de Magallanes".
El animal tendría un peso de unas 28 toneladas, se acercan a nuestras aguas para el verano, pero este año ha aumentado considerablemente su presencia, que es hasta abril o mayo cuando se van de la zona.
"Hace unos diez años atrás, que la población de ballenas en la parte occidental de la Antártica y de América del Sur, están aumentando paulatinamente y en especial la jorobada", explica Aguayo.
Las condiciones de alimentación las hacen estar más juntas, por lo que se convierte en una espectacular imagen de la naturaleza, que aumentó gracias a las políticas de protección de nuestro país.