El ministro de Minería, Hernán de Solminihac, junto a los directores nacionales de Onemi y Sernageomin, Ricardo Toro y Julio Poblete, evaluaron las primeras imágenes captadas en un sobrevuelo al interior del cráter activo del volcán Copahue, que dan cuenta de un sitio predominante de emisión gases, que recomienda mantener especial atención en un radio de 5 km alrededor del macizo.
Gracias a las condiciones meteorológicas favorables en las inmediaciones del volcán, se pudo apreciar de forma clara el interior del cráter, pudiéndose distinguir varios sitios de emisión de gases, siendo uno de ellos el más vigoroso y de mayor presión comparado con los demás.
Estos centros de emisión eran de color preferentemente blanco, con leves pulsos de tonalidades grisáceas, indicando la presencia de escasa ceniza.
“La actividad registrada al interior del cráter activo, no varía el cambio de Alerta Naranja que mantiene Sernageomin, por lo cual se recomienda especial atención alrededor del macizo”, informó el ministro de Minería, Hernán de Solminihac.
La autoridad precisó que no se descarta que la actividad del volcán inicie otro ciclo eruptivo de características similares a la erupción ocurrida recientemente o que se desarrolle una erupción mayor.
“De ahí la importancia de este seguimiento permanente de la actividad eruptiva del volcán Copahue, que busca observar emisión de material particulado, nuevos puntos de emisión de gases, grietas o puntos de mayor temperatura, entre otros”, destacó el ministro.
A través del sobrevuelo también se pudo apreciar una débil columna de color blanco, principalmente de gases y vapor de agua emitida desde el cráter, la cual alcanzó una altura de hasta 300 metros sobre el centro de emisión.
Las imágenes térmicas obtenidas desde el interior del volcán, en tanto, permitieron advertir temperaturas entre los 200º y 470º C, asociadas con los principales focos de emisión de gases magmáticos.
El titular de Minería agregó que este tipo se seguimiento se suma la valiosa información en línea de los equipos de vigilancia del Observatorio Vulcanológico de Los Andes del Sur (Ovdas), los cuales permiten comunicar de manera oportuna eventuales cambios en la actividad del volcán.