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Caso secta de Colliguay: ¿Por qué se desestimó el "delirio compartido" para la sentencia?

El inspector de la PDI, Jorge Naranjo, reveló antecedentes que dieron origen a la investigación que hoy mantiene a dos integrantes de la secta en prisión.

24Horas.cl TVN

Lunes 6 de marzo de 2017

El Inspector de Investigaciones Especiales de la PDI, Jorge Naranjo, entregó antecedentes de la investigación encabezada por su brigada respecto al caso de la "Secta de Colliguay" encabezada por Ramón Castillo, conocido como "Antares de la Luz".

Esto, luego que este lunes la justicia declarara culpables a Natalia Guerra -madre del lactante asesinado- y Pablo Undurraga, quienes deberán cumplir cinco años de presidio efectivo.

INICIO DE LA INVESTIGACIÓN

El inspector Naranjo aclaró que la investigación comenzó en 2013, luego que recibieran una denuncia a través de un correo electrónico sobre una comunidad donde se estaban cometiendo ilícitos, especialmente sobre el ingreso de una droga ilegal.

Con el paso de tiempo, específicamente en el mes de abril de ese año, la PDI logró obtener la declaración de Natalia Guerra, "quien nos cuenta la historia de la comunidad, la relación que tenia con el líder, Ramón Castillo, que con el tiempo se fue transformando en un dios".

Con el tiempo, Antares "recibe un mensaje donde Natalia tenía que ser su pareja (...) hasta que consigue tener relaciones sexuales y ella queda embarazada".

Luego de ello, el sujeto indica que el hijo es Lucifer, por lo que la esconde en una casa arrendada en Los Andes y se dijo a la familia que ella andaba en un viaje.

En noviembre de 2012 ella comienza con los trabajos de parto asistida por los mismos miembros "pero no lo logran asistir, por lo que la trasladan a una Clínica". Luego de ello, la llevan a una casa en Mantagua, "y le dicen que se quedara tranquila, que ya sabe lo que va a pasar con el bebé".

FALLO DE LA JUSTICIA

En el fallo, la jueza desestimó que los procesados actuaran bajo un delirio místico compartido, debido a que algunas acciones dieron cuenta que ellos estaban conscientes al momento de realizar sus actos, "por ejemplo, que lloraron cuando cometieron el delito", aclaró el inspector Naranjo.

"Aunque Ramón Castillo era un dios, ellos estaban consciente porque no estaban bajo ningún tipo de droga (...) La magistrada usa su criterio para catalogar o no este estado (místico compartido)".

Otra de las claves para no considerar el estado de inconsciencia "fue la declaración de Natalia Guerra", indicó el inspector.

A raíz de esta situación, la BIPE creó el grupo antisecta, que monitorea estas comunidades que suman casi 100 a lo largo del país.

Foto: Agencia Uno