El Ministerio de Relaciones Exteriores entregó una nota de protesta a la cónsul de Bolivia en Chile, Magdalena Cajías, luego que ese país entregara un polémico reloj a los asistentes a la cumbre del G77.
La polémica se basa en que el objeto tenía la forma de Bolivia, pero dicho país añadió parte del territorio de Chile, además del Pacífico.
Además, cuando fue presentado el obsequio, el canciller boliviano David Choquehuanca dijo que "este reloj tiene además un mapa con nuestro mar, nuestro litoral, que nos tiene que recordar que nuestro mar es irrenunciable. Tenemos que recordar eso todos los días, todas las horas, todos los minutos".
"El Gobierno de Chile considera que esta sorprendente representación cartográfica constituye un gesto inamistoso hacia nuestro país", dijo el canciller Heraldo Muñoz al enterarse del 'souvenir'.
En ese sentido, agregó que "contradice las seguridades que entregó el gobierno de Bolivia en el sentido de no introducir elementos ajenos a la agenda de la Cumbre G77"
"A ningún observador se le escapa que con este mapa se alientan irredentismos superados por la historia", agregó.
A la salida de la cancillería, la representante diplomática de Bolivia no quiso referirse a la situación.
Foto: archivo Agencia Uno