La Corte Suprema acogió un recurso de casación y concedió la custodia de dos menores de edad a su padre, quien mantiene una relación de pareja con una persona del mismo sexo.
En fallo dividido, el máximo tribunal determinó que la medida apunta a mantener la estabilidad personal de los niños, revocando así la sentencia impugnada dictada por la Corte de Apelaciones de Santiago, que había concedido el cuidado personal a la madre.
"Que, sin perjuicio de lo ya reflexionado, parece necesario señalar que si bien la estabilidad emocional ha de ser un criterio a considerar por los juzgadores a la hora de establecer tanto el régimen comunicacional como el ejercicio del cuidado personal, resulta indicativo para el caso que aquí se debate, el hecho que el legislador la asocie precisamente -la estabilidad- a la actitud que tenga cada uno de los padres para cooperar con el otro", expuso el documento.
El fallo agregó que "en consecuencia –continúa–, si los sentenciadores estimaban prioritario mantener la estabilidad de los niños, no podían obviar esta circunstancia, desde que ciertamente es demostrativa de una actitud que la perturba y que, en consecuencia, contraría el interés superior de los niños, que para su pleno desarrollo requieren mantener una vinculación "sana y cercana", a través de un 'contacto periódico y estable' con el padre o madre que no ejerza el cuidado personal, según establece el artículo 229 del Código Civil".