"A mi me retiraron cuatro litros de grasa. Es mucho, era para quedar con una hospitalización", contó Mary tras someterse a una liposucción en la espalda y abdomen con transferencia de grasa a los glúteos, además de una abdominoplastía en un departamento que recomendó una amiga.
Según cuenta, en el lugar no había anestesista y que "cada vez que la cánula entró sentí todos los dolores. Cuando yo me paraba al baño, estos líquidos chorreaban por mis piernas".
Pasaron unos meses, y la joven se dio cuenta que la cirugía no era lo que esperaba, además de seguir con mucho dolor en el abdomen. Exámenes revelaron que quedó con dos ombligos y a raíz de eso desarrolló una hernia.
Mary también se enteró que con los 74 kilos que pesaba y un índice de grasa corporal sobre el 27%, nunca fue apta para un procedimiento de este tipo en un departamento.
Por ello presentó una denuncia en el año 2018 en la Superintendencia de Salud y el médico fue formalizado por cuasidelito de lesiones graves cometido por un profesional de la salud, pero desde esa fecha su caso quedó sin ningún avance porque el Servicio Médico Legal (SML) nunca hizo el peritaje que requería la Fiscalía para comprobar o descargar la presunta negligencia médica.
El abogado de Mary tuvo que recurrir a la Contraloría para que este caso no prescribiera y el SML hiciera su trabajo. Adjuntó todos los oficios emitidos desde la Fiscalía solicitando el peritaje.
"Evidentemente hay negligencia y nadie responde. Me mandaron 11 oficios al SML, el cual decía que estaba saturado", indicó el abogado Miguel Fernández.
Otros casos
Pero este no sería el único caso, según el abogado Gilberto Rudolph, desde el año 2016 se ha visto enfrentado a la misma problemática, señalando que su causa ya prescribió en primera instancia. "Respondían por escrito diciendo que estaban colapsados y que 'ya lo haremos oportunamente'. En vista de eso yo concurrí personalmente hasta el SML y no conseguí nada", cuenta el defensor.
Debido a ello, Rudolph advirtió que si pierde la apelación y la causa prescribe, demandará al Estado porque para defender a su clienta es imprescindible el examen de un legista.
Crisis del Servicio Médico Legal
Entre el 2015 y el 2021 la Superintendencia de Salud recibió 1.955 solicitudes de mediación por intervenciones quirúrgicas, siendo 344 de cirugías plásticas.
Una de las respuestas que más llamó la atención de los abogados, es que el SML no puede realizar los informes porque no cuenta con un perito, ya que el que había fue despedido en diciembre de 2019.
"Al momento no existe ningún perito por lo que ningún informe se está realizando", señaló el abogado Fernández.
24 Horas se contactó con el Servicio Médico Legal sobre las razones por las que no se ha contratado a nadie en más de dos años, desde donde señalaron que "la actividad pericial forense en el ámbito de la medicina legal, no es una actividad muy atractiva para la mayoría de los médicos", según dijo el coordinador técnico de la Subdirección Médica del SML, Armando Valdés.
Asimismo agrega que "son pocos los que se interesan en la actividad pericial forense". Nos explica que un médico con 11 horas semanales contratado por el SML gana 600 cientos mil pesos mensuales y alcanza a hacer dos peritajes, mientras que en el ámbito privado, ese mismo perito por hacer un solo peritaje gana un millón 300 mil pesos.
A la crisis por falta de peritos hay que sumar la excesiva demanda de trabajo. En 2019 habían 546 exámenes pendientes de presunta negligencia médica. A la fecha quedan 247.
"El Ministerio Público en algún minuto reconoce que las falencias nuestras afectan el desarrollo de su investigación", cuenta Valdés, indicando que estos "tienen la facultad de poder recurrir a terceros para buscar soluciones, y evidentemente que nosotros hemos estado hablando con nuestras autoridades para implementar políticas de desarrollo institucional que nos permitan solventar estas falencias".
Esto fue lo que ocurrió en el caso de Mary, ya que la Fiscalía contrató un perito externo para hacer su informe, el cual en apenas una semana se entregó y será usado en el juicio. No obstante a ello, la presunta víctima de negligencia médica señaló que "yo quedé viva y yo tengo que ser la voz de los que pueden hablar".