Las labores de limpieza avanzan y las responsabilidades todavía pasan de un lado a otro.
Un día después de que el río Mapocho se desbordada e inundara las obras y parte de la autopista Costanera Norte y la costanera Andrés Bello, el Gobierno y la empresa siguen culpándose mutuamente.
El Ministerio de Obras Públicas apunta directamente a Costanera Norte, asegurando que se les advirtió que debían tomar otras medidas de contención ante la llegada del sistema frontal a la zona central.
Además, inició un sumario para establecer si hay responsabilidades en la fiscalización realizada tanto por empleados públicos como de parte de Zañartu Ingenieros, grupo contratado para revisar la calidad y avance de las obras de la autopista y que previamente fiscalizaron el Puente Cau Cau.