Si de prendas exclusivas se trata, el negocio tiene de sobra. Alta costura, diseños originales y hechuras innovadoras.

Éstas y otras características han convertido al negocio de la ropa "reciclada" uno de los más rentables y apetecidos del último tiempo, especialmente en Chile, que ya se ha convertido en el segundo país que más ropa usada importa desde Estados Unidos, según un ránking de Naciones Unidas.

La llegada del producto es en fardos, los que luego van a un proceso de selección y distribución, al gusto del cliente particular o la boutique que requiera de este tipo de ropa para su venta al detalle.

Por si fuera poco, ya existe un público cautivo que disfruta abiertamente de las ventajas de comprar ropa de segunda mano: encontrar algo único, a buen precio y en la talla que no siempre está disponible en el retail.

Revisa el informe de Pamela Morales:

Imagen: TVN